No hay nada ahora que yo pueda hacer para impedirlo.
Me resta solo detenerme a sentir como mi alma se escapa por cada poro de mi piel
Como se escapa en cada respiro
Como se escapa con cada latido de mi corazón.
Ajeno completamente a lo que dice la canción que suena
No importa si me pierdo o no de algo, porque ya no hay algo que me importe.
Me ahogo, no me incomoda, ya adquirí la costumbre de hacerlo
Volveré a respirar en algún momento.
Diez gotas de alcohol cada dos, tres horas.
Estoy cansada ya de las botellitas de vida
Mínimo cuatro al día si se quiere salvar, dijo el doctor.
Yo no me quiero salvar, ya es poco lo que importan las cosas,
Pero lo hago por ti, tantas te debo ya, que solo puedo usar mi vida para pagarte.